-1 de enero: Esto no es un diario al uso. Ni siquiera lo asumo como un propósito del nuevo año. Digamos que es una declaración de intenciones. Me gustaría tener algo que decir y dejarlo escrito cada día del año. Una anécdota, una reflexión, una tontá.... sin pretensiones ni ataduras. Supongo que es producto de la fecha, de esa inercia que nos lleva a empezar algo por el hecho de ir acompasado con el año recién estrenado. Sirva por ejemplo para dar las gracias a quién corresponda por poder despedir un año y arrancar uno nuevo con gente alrededor que le da sentido a la vida, con la familia, con salud, con buen ánimo y con amor. No sé si es pretencioso pero las cosas deben estar bastante bien cuando al nuevo año le pides más de lo mismo.
En el capítulo de las reflexiones del año nuevo: a mi me parece bien lo de Jenni Hermoso dando las campanadas. Admito otras interpretaciones, pero creo que esta mujer adquirió un protagonismo que no buscó y por un motivo que no le desearía a una hija. Juzgar su reacción y su manera de afrontarlo es un ejercicio de cinismo nauseabundo.
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-2 de enero. Primer día de gimnasio y ayuno intermitente. Instagram me recuerda constantemente que la gente mayor -como yo- puede ponerse en forma en casa, con una silla y 15 minutos al día. A este paso entraré en una de las app que se ofrecen para probar.
El victimismo del PSOE por el monigote de Sánchez apaleado es bastante patético; un victimismo que no se corresponde con su posición en otras escenas y actitudes tan deplorables como la del día de fin de año. A mi lo de Ferraz me ha recordado al 'judas' que hacen en el pueblo el domingo de resurrección,. Entre otras cosas porque cuando los niños apaleábamos a ese muñeco relleno de paja y cabeza de botijo tampoco sabíamos mucho del personaje, pero sí teníamos claro que simbolizaba a un malo malísimo que merecía que lo pusieran en lo alto de un poste, que le pegasen tiros con las escopetas desde abajo y que luego los chicos arrastrásemos lo que quedaba del 'judas' por la plaza del pueblo. Dicho esto, lo que sí me parece preocupante es la inoculación de odio a la que asistimos y con la que posiblemente colaboramos a través de eso que llamamos redes sociales, canales por los que circula y se expande la mala baba.
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-3 de enero. Es miércoles, aunque no lo parece. Ha llovido en Toledo, que falta hace. Esto demuestra que no está demás pedir como deseo de año nuevo que haya 'buenas noticias' para todos. Lo de la lluvia es una buena noticia universal, aunque no todo el mundo la valorará igual.
No sé si es cosa mía y supongo que será diferente en el caso de las casas con niños, pero a estas alturas cuesta mantener el espíritu navideño. Supongo que es el efecto provocado por este afán de adelantar tanto la Navidad. Pero los que no renunciamos a las tradiciones sabremos mantenernos fieles a los Reyes y a los roscones.
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-4 de enero. La primera semana del año tiene un aire de relajación contenida, es una especie de pasillo que nos conduce al verdadero año nuevo. En este afán por retar al calendario, apuntamos también este momento de confusión en el que los centros comerciales anticipan las 'rebajas' cuando todavía los Reyes Magos están en plena faena.
Se conocen los datos sobre siniestralidad en las carreteras del año 23. Me parece casi milagroso que las cifras no se disparen teniendo en cuenta la irresponsabilidad palpable, la propia y la ajena. No me refiero solo a las carreteras y a las distracciones, sino también a la jungla de las ciudades en las que proliferan patinetes y bicicletas. En la rueda de prensa se hace alusión a las motos y no puedo dejar de pensar en las escenas que presencié en las vacaciones en Formentera, toda una alegoría de la irresponsabilidad y/o la temeridad.
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-5 de enero. Las cabalgatas se acercan y con ellas esa magia que no se puede comparar con cualquier otra ilusión que podamos experimentar en la vida. El niño que fuimos y el que llevamos dentro nos invita a compartir y expandir esa magia y a vivirla, aunque sea de otra manera, en los pequeños detalles, en los gestos y en la celebración. Es un día especial y así debe ser tratado, incluida la liturgia de los regalos junto al árbol o el afán por sorprender a alguien.
El último bocado de la Navidad se lo damos mañana al roscón. Nos refugiamos en la tradición para justificar un último exceso antes de ponernos a saco con la verdura y también para tapar nuestras debilidades ludópatas que nos incita a caer en la tentación del Niño. ¿Y si cae aquí?
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-6 de enero. Los Reyes Magos han dejado los regalos junto al árbol. Último capítulo navideño. Inevitable recordar escenas infantiles en los diferentes papeles que la vida te coloca para vivir una jornada como esta: como hijo, como padre, como hermano mayor cómplice de sus majestades... Los Reyes de ahora mantienen el encanto, aunque sea de otra manera. Cada etapa de la vida tiene sus códigos, sus inquietudes y sus miradas. La clave, entiendo, es tratar de exprimir cada una de ellas, dejando el espacio justo a la nostalgia y saboreando lo que toca; por ejemplo, el café estupendo que hace la cafetera que nos han dejado este año, de las que muelen el grano y todo. Café compartido, regalo perfecto.
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-7 de enero. Es domingo y cumplo una semana completa asomándome por este rincón bloguero. Asumo que se me pasará, pero mientras tanto aprovecho para dejar por aquí algún apunte de esos que no van a ninguna parte, ni falta que hace. Toca recoger el árbol y subir las cajas al trastero, donde dejaremos guardados el espíritu navideño y todos sus aderezos. Ojalá que podamos abrirlas con la misma ilusión dentro de un año. Toca retomar el pulso de lo cotidiano. Toca subirse a la báscula y comprobar que los excesos de estos días, en efecto, tienen las consecuencias lógicas que ya intuíamos. Toca olvidar el roscón o, mejor dicho, toca tenerlo muy presente para afrontar el paso por el Gym. Allá vamos.
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-8 de enero. Es lunes y es el típico día de reencuentros en los que no tienes del todo claro si debes felicitar el año nuevo o si debes dar la mano, besos o abrazos. Imposible quedar bien en todos los casos. Ayer vimos 'La sociedad de la nieve' que es una película bien hecha y consigue emocionarte. No sé si tiene mérito lanzarse a un proyecto en el que, de entrada, tienes que renunciar a la capacidad de sorpresa o si, por el contrario, es ventajista porque sabes que el tema es de los que tocan la fibra sensible y generan debate. Más allá de las cualidades cinematográficas, a mi me parece que la película es de las que te hacen pensar en cosas como la capacidad del ser humano por aferrarse a la vida, o en los límites del sufrimiento, del dolor físico o la presión emocional. Te hace pensar en la fuerza que da la mentalidad de equipo frente al individualismo, en la generosidad, en el liderazgo de unos y la disciplina de otros, en las contradicciones de uno mismo, en la fuerza y la debilidad de la fe, en las relaciones de los seres humanos con los demás y en esa relación que mantenemos con nosotros mismos, nuestras fortalezas, debilidades, contradicciones... Dicho esto, parece claro, al menos en mi caso, que la película merece la pena.
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-9 de enero. Los políticos son personas que sienten y padecen. Semejante obviedad choca con una realidad, la que ha dado vía libre para el linchamiento. Los políticos lo saben, lo sufren y, en algunos casos, también lo alientan. El resultado perverso es la demonización del colectivo, la expulsión o aniquilamiento de muchos de los miembros de la especie y/o la huida de otros. La reflexión viene a cuento por una conversación pausada en la que, por otro lado, queda constatado el parecido razonable -desde este punto de vista- entre la imagen y las sensaciones que perciben los ciudadanos de la acción política y la que emitimos -en general- a través del ejercicio de esta 'bendita' profesión que es el periodismo. Compartimos un descrédito preocupante. No hace falta decir que unos y otros estamos contribuyendo a ello. Y aunque también sea una obviedad, conviene asumir que toda generalización puede derivar en un trato injusto para los integrantes de cualquier colectivo.
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-10 de enero. Lo decía ayer sobre los políticos y debo matizar. Cuando digo que los políticos son personas que sienten y padecen, también debo recordar que toda generalización será injusta o poco adecuada para miembros del colectivo. Además, no hay norma sin excepciones. Aplicable a cualquier grupo social o profesional.
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-11 enero: Jueves. La Navidad y sus excesos siguen pasando factura. Y la edad, que también es fuente inagotable de agotamientos varios, de taras físicas y achaques que juegan en contra de esa voluntad -también vulnerable- con la que tratamos de combatir los efectos que han quedado en el cuerpo y en los cinturones.
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12 enero. Viernes. Me temo que si sigo con esto de los comentarios diarios voy a ser repetitivo. Por ejemplo, con una de esas cosas que me tiene entre alterado, triste y jodido; asistimos con naturalidad a la era del linchamiento. Las llamadas redes han devenido en un espectáculo que en muchos casos podríamos comparar con el de las lapidaciones. Con o sin juicio previo. Las críticas razonadas y argumentadas son la excepción y la norma es el exabrupto, el insulto, el desprecio más brutal....El resultado es, cuando menos, asqueroso. Y tiene el componente vomitivo añadido de que se puede ejercer el aniquilamiento desde el anonimato, lo que aporta ese componente de la cobardía que hace aún más detestable la cosa. No importa que sea un político, un actor, un cantante o, por supuesto, un periodista. Cualquiera es un objetivo potencial de la masa enfurecida. Lo importante es hacer daño. En fin.
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-13 de enero. Hemos visto a Nuria Espert en el Teatro Español interpretando La isla del aire, de Alejandro Palomas. Ves en acción a esa mujer de 88 años y tienes la sensación de estar asistiendo a un acontecimiento histórico. El aplauso final tiene un aire de homenaje y despedida que va mucho más allá de lo que acaba de suceder. Es el testimonio colectivo de admiración y gratitud a una mujer que posiblemente nació para subirse a un escenario y que, en todo caso, morirá sobre las tablas. No se entendería la huella que el teatro ha dejado durante siglos en las gentes de todo tipo y condición si no surgieran muy de vez en cuando personajes de la talla de Nuria Espert. Algo así se percibía cuando cayó el telón, aunque tampoco sabría explicarlo.
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-14 de enero. Los domingos son como los bombones de la caja de Forrest Gamp. Este domingo me ha llevado -después de unos pocos años- a la Venta del Alma, que es uno de esos sitios con 'alma' toledana y encanto universal. Ha sido un domingo de puertas abiertas hacia nuevas etapas que surgen de manera inesperada y que te dejan pensando en lo que conviene, lo que interesa, lo que apetece o lo que ilusiona. Nunca es tarde para plantearte proyectos de futuro, sobre todo si la ilusión es compartida con la persona con la que quieres compartir esa ilusión. Y también domingo de fútbol, de clásico 'blanco' y de uno de esos torneos -la Supercopa- que no puede ser un torneo menor si el rival es el Barça y el Madrid gana cuatro a uno.
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15 de enero. Volver a la mascarilla obligatoria, aunque sea en el Hospital, nos trae recuerdos ingratos e imágenes de pandemia. Dicen que este lunes es el día más triste del año y, hombre, es verdad que tiene un aire de cierta melancolía, pero yo firmo que este sea el día más triste que nos toque vivir este año.
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16 de enero. Dice Felipe González en un acto en Madrid que "la amnistía es una autoamnistía, hecha por los propios amnistiados". Y dice más cosas, que "es rara y difícil de aceptar", que la división de poderes "está seriamente amenazada" y que él mantiene la posición que tenía el PSOE antes del 23 de julio. Como es muy probable que esta especie de diario nunca se publique puedo decir que yo me identifico bastante con esa manera de entender lo que está ocurriendo y me agrada ver que el acto lo presenta Eduardo Madina, una de esas voces que aportan un toque de sensatez y mesura al discurso político. Tal como está el patio, es evidente que opinar es un ejercicio de riesgo, aunque sea desde la moderación y con el mejor talante. Cualquiera que diga lo que piensa queda expuesto al linchamiento y aunque siempre hay quien le quita importancia porque entiende que detrás está el fenómeno 'hater', me parece muy preocupante. Tanto si se trata de personas reales identificadas o anónimas, como si son cuentas prefabricadas, significa en todo caso que hay corrientes de odiadores que extienden su mala baba por ese mundo digital que se alimenta del mundo real.
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17 de enero. En este diario presuntamente personal he decidido no hablar de política, salvo que cambie de opinión y lo haga. Es lo bueno y lo malo de las normas no escritas, ni pactadas. De hacerlo, no habría pasado por alto el 'colorín colorado' de Turull con el que amenaza Junts en caso de que el Gobierno y el PSOE no se pongan a la tarea de constitucionalizar un referéndum de independencia. Bastaría con escuchar a los señalados recordando que esa es una línea roja que jamás podrían ni siquiera plantearse, pero la deriva basada en el argumento sanchista de la necesidad y la virtud ha dejado en la reserva el depósito de la credibilidad y no hay carburante para avanzar ni medio metro.
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18 de enero. Visita de prensa al CORE de Iberdrola en Toledo. Centro de operaciones de renovables. Impresiona el dispositivo y llama la atención lo poco conscientes que somos, en general, del enorme avance que se ha producido en el tema de las energías renovables. La gente tampoco se imagina que todos los molinos eólicos que vemos en cualquier paraje de España y del mundo se controlan desde un edificio de la Avenida de Europa de Toledo. El poderío de Iberdrola nos debería hacer sentir orgullosos de la marca España. En todo caso, muy por encima del despliegue tecnológico me quedo con la enorme dimensión de su CEO, de nombre Mario y de nacionalidad chilena. Escuchar su manera de entender el mundo desde un puesto como el suyo es un ejercicio de esos que, además de impresionar, te hacen sentir pequeño, casi diminuto... Pero ya tiene uno edad como para saber que no podemos dedicar demasiado tiempo a los complejos y otras gaitas.
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19 de enero. Viernes de invierno. Llueve y hace frío que es lo suyo. Toledo es un pueblo grande, pero un pueblo al fin y al cabo. Siempre aparece alguien que conoces y te conoce, aunque a veces no recuerdes su nombre y tardes en ubicarlo. Esta dimensión social tiene inconvenientes, pero también cierto encanto. Es cuestión de hacerse a ello, aunque hay quien nunca termina de acostumbrarse.
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20 de enero. Sábado casero, con paréntesis deportivo, aperitivo, comida sana, sofá y mantita. Elegir película es un ejercicio de riesgo porque con tanta oferta siempre acabas teniendo la sensación de equivocarte. Hace unos años -no tantos- íbamos al videoclub a elegir una o dos películas. Las novedades eran las más cotizadas pero muchas veces tenías que recurrir a otras; el caso es que ahora tienes a tu alcance un catálogo tan enorme que no sabes si te apetece ver una serie de la que te han hablado y que no te puedes perder, una película que te suena, otra que ganó un Oscar hace unos años, el Padrino, Torrente, un capítulo de Farmacia de Guardia o Dallas.... Después de una hora dando vueltas también puedes acabar con un rollo infumable, el telediario en diferido o un ratito de First Dates.
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21 de enero. Es domingo y toca podar. Es un ejercicio poco valorado, pero bien interesante, incluso necesario. El problema de la poda es que nunca encuentras el momento y también que cuesta elegir las ramas que debes cortar para intentar que las buenas puedan desarrollarse como Dios manda y darle vitalidad al árbol. Como la vida misma, vamos. Si supiéramos podar en tiempo y forma, otro gallo nos cantaría.
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22 de enero. Lunes. Arranca la semana crítica de la cuesta de enero. Un buen momento para valorar otros tiempos donde las mismas rampas eran especialmente empinadas. Arrecia el escándalo del VAR en el Bernabéu por el partido del Almería. Es el Madrid y todo se magnifica. Un antiguo jefe decía que su primer equipo no es el Atleti sino el que juega contra el Real Madrid. El sentimiento antimadridista solo es comparable en intensidad al sentimiento madridista. Lo de la polarización en general tiene su mayor reflejo en esta dualidad histórica. Cualquier cosa que pueda decir al respecto, ahora o en el futuro, sería siempre desde la perspectiva del merengón que llevo dentro.
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23 de enero. Pues nada, que dice Laporta que la Liga está adulterada. Decía ayer que no seré objetivo nunca en temas futboleros, pero es que lo del presidente del Barça es tan.... no sé si decir desvergonzado o patético. Hay que ser osado -por decirlo de manera diplomática- para decir algo así cuando la justicia investiga los pagos que presidentes como él hicieron durante años a uno de los jefes del arbitraje español. Tela marinera.
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24 de enero. Que San Francisco de Sales, patrón de los periodistas, nos ampare ante esta ola de descrédito y desprestigio que nos arrastra. Supongo que hay una parte inevitable porque nos cuelan en el saco de la política y de esa polarización que todo lo inunda, pero también hay una aportación evidente de nuestro colectivo. Me sirven las alusiones de los últimos días al fútbol para lamentar la proliferación del periodista que se pone la camiseta para saltar a la cancha informativa. Podríamos ceñirnos a las tertulias y a los líderes de opinión, pero la mancha se extiende por platós, estudios, páginas y digitales. Barro para casa si digo que los medios públicos debemos y podemos ser dique de contención en los que se respete el espacio de la información y la opinión, en los que se se imponga la neutralidad por más que se nos acuse de lo contrario y nos arrastren las malas prácticas de unos cuantos 'villanos' que asaltan ese espacio y lo pervierten. Líbrenos de ellos San Francisco de Sales.
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25 de enero. Dijo Page ayer que el PSOE está en el extrarradio de la Constitución. Parece una gravísima acusación, pero lo chocante del caso es que lo dicho por el presidente de Castilla-La Mancha se queda corto si se observa como referencia lo que el Partido decía antes de las elecciones de julio. Entonces, hace solo unos meses, todos -empezando por Sánchez- coincidían en que la Constitución no permitía la aprobación de una Ley de Amnistía. Es decir, al PSOE y a los ministros del Gobierno -incluidos los jueces- les parecería entonces que la Ley de Amnistía estaría más allá del extrarradio de la Constitución. Aún así, a Page le llueven los palos desde ambos lados. Y uno, que nunca aspiró a ser un agudo analista político, se pregunta si eso le coloca exactamente en el centro del tablero. Si aún fuese cierto que la fuerza sociológica dominante en España estuviera precisamente en el centro político, tal vez se entendería un poco mejor que Page sea el único socialista que gobierna con mayoría absoluta.
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26 de enero. Cerramos ronda de entrevistas políticas en la tele y la radio de Castilla-La Mancha. VOX, PP y PSOE han pasado por el plató de informativos. Pocas sorpresas. Las consignas se imponen más allá de los argumentos. La política nacional lo invade todo y las cosas de aquí, las más cercanas, quedan como asuntos secundarios. Duele especialmente lo poco que cuenta ahora el expolio del trasvase.
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27 de enero. Xavi anuncia su dimisión en diferido. El Barça pierde 3-5 con el Villarreal después de haber remontado un 0-2. Dice que se va el 30 de junio y viene a ratificar que ser uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol español no es una garantía para alcanzar el mismo nivel -ni parecido- en el banquillo. El Madrid remonta en Las Palmas, como casi siempre.
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28 de enero. Seguimos con fútbol. En el Salto del Caballo, el Toledo pierde ante el Cazalegas 0-2 con 2.500 personas en las gradas. Tercera división. que ahora es la quinta categoría nacional Imposible no rememorar otros tiempos en ese mismo estadio. Vivimos y cantamos goles históricos, conocimos desde dentro los entresijos del fútbol y sufrimos el palco. Salgo del estadio con un regusto amargo y aún así queda claro que pervive el sentimiento toledanista verdiblanco. Quiero pensar que llegarán tiempos mejores porque el Club ha superado tiempos convulsos y ahora, con propietarios que destilan seriedad y han saneado las cuentas, merece que los resultados coloquen al Toledo unos peldaños -no digo cuantos- más arriba.
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29 de enero. Uno de los debates nacionales es el cartel de la Semana Santa de Sevilla. Como en casi todo lo demás se imponen las posiciones radicales. Visto desde fuera uno cree que el debate está aliñado con muchos prejuicios y una más que notable falta de sinceridad. No dicen todo lo que piensan los que ven en la imagen un cartel del 'orgullo' y desde luego se muerden la lengua los que estarían despotricando contra un alcalde de otro signo político. Me quedo con el 'ojú' de Paco Robles en Twitter como aportación fundamental para entender un poco mejor el debate lejos del Guadalquivir.
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30 de enero. Junts vota con PP y VOX contra la Ley de Amnistía. Más madera. Dicen que 'vuelve a los corrales', pero los que afirman tal cosa supongo que no tienen en cuenta que si el toro vuelve a los corrales acaba siendo sacrificado y no vuelve a la plaza. Siguiendo con el símil, se me ocurre que, en efecto, esta Ley no tiene un pase y no es un toro apto para la lidia. Pero no hablamos de toros y los matadores que andan en la faena, me temo que volverán a ponerla en suerte, que volveremos a tener banderillas, picadores y una estocada final. Creo que se le atribuye al Cordobés aquella máxima que era toda una declaración de intenciones: "esta tarde, puerta grande o enfermería". Seguro que Sanchistas y Sanchólogos le reconocen ese valor frío que roza la temeridad. Lo de torear por derecho ya es otra cosa. Lo de Junts, en todo caso, es una buena demostración de fuerza de Puigdemont, pero dicho queda que uno nunca aspiró a ser un analista político de los que nos ilustran cada día en tertulias y columnas. Más que un retroceso parece un paso atrás para coger impulso y garantizarse la impunidad de todos. Desde una aparente firmeza, el PSOE vuelve a ser un partido humillado. o al menos a mi lo parece.
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31 de enero. La amnístía se atasca dice la prensa. En medio de un debate absolutamente polarizado y envenado llama la atención el punto de vista de algunos líderes de opinión que arremeten contra Puigdemont. ¿Y no era precisamente eso lo que advertían los pocos que se atreven a rechistarle a Sánchez? Hace meses que Page habló del peligro de poner el 'mando a distancia' de la gobernabilidad en manos del todavía prófugo. ¿Ahora descubren que el personaje no es fiable?. ¿Merecía la pena tanta contorsión para contentar a Junts?. El desgaste al que Sánchez ha sometido al PSOE -a mi me lo parece- es enorme. Anoche ya escuchaba en una tertulia el argumento del respaldo de las bases al sanchismo en alusión a los militantes y a la consulta tan lejana ya en nuestra memoria. La fuerza política de los partidos son los votos y no parece arriesgado afirmar que entre los que pusieron la papeleta de Sánchez en las urnas en julio son muchos los que consideran que se ha hecho un uso ilegítimo de su apoyo. Nadie dijo que la amnistía era la clave para afrontar esta legislatura y son legión los que se rebelan contra el argumento que coloca a esos votantes como pieza angular del giro. Solo hay que escuchar a los independentistas para constatar que no es cierto que esto sea un camino hacia el diálogo y la concordia. Ellos se mantienen firmes en su posición; ni les importa la gobernabilidad de España ni se molestan en disimularlo.
